Un total de 69 personas que eran sometidas a trabajo análogo a la esclavitud fueron rescatadas por las autoridades en el estado de Goias, centro oeste de Brasil y próximo a la capital.

Los fiscales hicieron un recorrido por once carbonerías en varios municipios de la zona, operados por una amplia familia, tras recibir una denuncia de que habría habido un intento de homicidio contra un trabajador.

Las actividades ejercidas por esas carbonerías contemplaban la deforestación del bosque de sabana, producción de carbón y entrega del mismo a las empresas siderúrgicas del vecino estado de Minas Gerais.

Los trabajadores eran traídos irregularmente de áreas pobres del estado de Minas Gerais y no eran registrados, con lo cual los patrones no estaban obligados a pagar salarios, contribuciones sociales y días de descanso.

"Las condiciones de vivienda y trabajo encontradas en las 11 carbonerías eran extremamente precarias, con innúmeras irregularidades", informa el comunicado del Ministerio. "No les era proporcionada agua potable, los alojamientos eran extremadamente precarios" y algunas barracas, por ejemplo, eran construidas con lona y el suelo de tierra.

En un país con gigantes áreas destinadas al agro, muchas aisladas de grandes poblaciones, las autoridades brasileñas rescataron en 2010 a 2.628 trabajadores en condiciones análogas al trabajo esclavo.

Las autoridades combaten el trabajo esclavo desde hace años, hacen públicas las listas de los hacendados que lo promovieron, a quienes además les cortan el acceso al crédito, pero los casos siguen ocurriendo.